Control del tráfico comercial y espacios para logística en núcleos urbanos
Contexto
Estocolmo, comprometida con la Agenda 2030 y la neutralidad climática de la UE, impulsa la transformación sostenible de su movilidad urbana. A través del programa Klimatklivet, la Agencia Sueca de Protección Ambiental subvenciona iniciativas para reducir emisiones, especialmente en transporte de mercancías. El Ayuntamiento desarrolla además el “Stockholm Environmental Programme 2040”, que prioriza la mejora de la calidad del aire en el centro urbano mediante colaboraciones público-privadas y la implementación de soluciones GovTech innovadoras.
Problema
Estocolmo tenía por objetivo reducir las emisiones del transporte de mercancías y mejorar la eficiencia del espacio de carga urbana como parte de su transición hacia una zona de cero emisiones. Sin embargo, enfrentaba importantes limitaciones para gestionar la movilidad logística de forma sostenible, debido a una infraestructura de sensores dispersa y la falta de integración de datos. Esta carencia impedía monitorizar en tiempo real los desplazamientos comerciales y el uso de las acera en la descarga de mercancías, generando paradas en zonas no autorizadas, mayor congestión y dificultando la planificación de infraestructuras adaptadas a la demanda real.
Requisitos de integración
Solución propuesta
La ciudad de Estocolmo implementó la plataforma de inteligencia de movilidad de Vianova, que integró datos en tiempo real provenientes de vehículos comerciales conectados mediante GPS y estándares abiertos (MDS/GBFS). Esta solución permitió analizar patrones logísticos urbanos, identificar zonas críticas de carga y descarga y optimizar dinámicamente el uso del espacio público. A través del análisis automatizado de datos y la generación automatizada de alertas e informes, la plataforma reforzó la capacidad del Ayuntamiento para planificar infraestructuras logísticas sostenibles, tomar decisiones basadas en evidencia y anticipar necesidades operativas con mayor agilidad.
Impacto
La implementación de Vianova en Estocolmo permitió monitorizar en tiempo real el 20 % del tráfico comercial, lo que facilitó el despliegue de 12 micro-depósitos eléctricos y la creación de 20 nuevos hubs de carga para reducir la congestión y mejorar la sostenibilidad. El análisis de más de 330.000 paradas mostró que la mayoría de las entregas se concentran en la mañana, con una duración media de 35 minutos, y que casi todas en la futura zona de bajas emisiones se realizan con vehículos que no cumplirán la normativa.
A partir de estos hallazgos, la ciudad planea ampliar la cobertura de datos con más fuentes logísticas, analizar flujos de origen-destino, crear una plataforma integrada de datos y desarrollar hubs logísticos estratégicos.
Con este enfoque integral, Estocolmo se posiciona como referente en la gestión sostenible del transporte urbano de mercancías, ofreciendo un modelo replicable para otras ciudades.