El cambio climático incrementa la frecuencia e intensidad de desastres, forzando a las administraciones a adoptar sistemas de alerta y respuesta basados en datos. Iniciativas europeas como el servicio de alerta temprana Galileo en desarrollo y marcos ONU promueven el uso de tecnologías espaciales para anticipación y gestión de emergencias. En este entorno, los gobiernos impulsan pilotos y despliegues que combinan observación de la Tierra, modelos y operaciones de campo para proteger a la población.

Los dispositivos actuales de vigilancia no cubren de forma continua áreas extensas y de difícil acceso, lo que retrasa la detección y complica la priorización.

La información llega fragmentada entre fuentes meteorológicas, hidrológicas y reportes ciudadanos, dificultando un panorama común.

La planificación de evacuaciones carece de evidencia dinámica sobre la evolución del peligro y la exposición de personas e infraestructuras.

La coordinación interinstitucional se ve limitada por la falta de capas coherentes y trazables para decidir bajo presión.

Productos analíticos automáticos: permiten generar, de forma recurrente, mapas de peligro y afectación (inundaciones, incendios, deslizamientos) a partir de series satelitales.

Activación automática de eventos: facilita disparadores configurables para alertas tempranas y notificación al centro de emergencias.

Apoyo a campo vía app móvil: agiliza la verificación in situ, con captura sistemática y estandarizada de evidencias para cerrar el ciclo detección-validación.

Despliegue ciberseguro on-prem: garantiza la operación continua en centros de alerta y control de datos sensibles en infraestructuras propias.

Cartografía operativa y rapid mapping: permite elaborar mapas rápidos de situación y rutas prioritarias para evacuaciones escalonadas y apoyo a la toma de decisiones.

Agilidad y resiliencia: reducción del tiempo entre señal de evento y emisión de alerta gracias a la analítica automática y los event triggers. Además, mejora la coordinación durante picos de demanda.

Seguridad y trazabilidad: decisiones basadas en evidencias geoespaciales versionadas y verificadas en campo, lo cual permite un registro auditable luego del evento.

Eficiencia operativa: focalización de recursos en zonas de mayor riesgo y generación de rapid maps para mando y control, disminuyendo desplazamientos exploratorios.

Sustento metodológico: la literatura y guías internacionales muestran que GIS y datos satelitales mejoran la conciencia situacional y coordinación multiactor en desastres, reforzando estos beneficios.

Cliente: Protección Civil - Min. Seguridad Argentina

• Instrumento de contrato: Compra directa por exclusividad
• Precio: 450.000U$S + IVA
• Duración del contrato: 2 años