
La evolución hacia el govtech 3.0 en España: una estrategia de innovación para el sector público
En solo cinco años, el govtech ha pasado de ser una apuesta experimental a convertirse en una herramienta clave en la transformación del sector público español. Este artículo repasa esta transformación destacando algunos de los proyectos pioneros.
En España, el govtech está dejando atrás sus raíces experimentales para convertirse en una estrategia efectiva para llevar a cabo innovación pública. En los últimos cinco años, hemos sido testigos de una transformación apasionante en las iniciativas govtech del sector público: de pilotos puntuales a proyectos estratégicos y ambiciosos, cada vez más integrados en el núcleo de la innovación de las instituciones. Tan sólo en 2025, se preveé que se publiquen a nivel nacional alrededor de 14 Concursos de Proyectos (Artículo 183 de la LCSP), respaldados por un presupuesto total de aproximadamente un millón de euros, lo que evidencia un creciente entusiasmo por la propuesta de valor de empresas de nicho tecnológicas. Son ya casi la mitad de las comunidades autónomas del país las que han ido adoptando estrategias govtech; con referentes como Madrid, el País Vasco y Cataluña, el mensaje es claro: el govtech en España está madurando, consolidándose y preparándose para dar su próximo gran salto.
Pero, ¿cómo se ha llegado hasta aquí?
Fase 1: “laboratorios o programas govtech” para sentar las bases
Entre 2020 y 2024, las instituciones públicas españolas emprendieron un viaje exploratorio en el ámbito govtech, adoptando metodologías innovadoras y fomentando marcos de colaboración entre entidades públicas y startups ágiles. Esta primera fase supuso un cambio crucial en la cultura organizativa, promoviendo la apertura y la experimentación, aunque con un enfoque todavía fragmentado y reactivo. Las iniciativas se desarrollaban dentro de programas claramente definidos - en ocasiones denominados como Labs - , centrando sus esfuerzos en generar nuevas dinámicas de innovación dentro de las instituciones públicas.
Fue un primer paso para introducir metodologías de innovación govtech en las instituciones públicas, así como nuevas formas de trabajo, como la definición de retos de innovación dentro de instituciones interesadas en la colaboración entre gobierno-startups para impulsar la innovación; la identificación de startups govtech relevantes en una región determinada; y el desarrollo de pilotos basados en casos de uso específicos.
Principales características de la Fase 1
- La actividad se desarrolla en un formato de “laboratorio”[2]: con una duración determinada, sin centrarse en tecnologías concretas y con equipos trabajando de manera “atomizada”[3].
- Los programas responden a oportunidades y necesidades inmediatas (reactividad): no se prioriza una estrecha alineación con las necesidades estratégicas institucionales.
- La contratación sigue siendo mayoritariamente tradicional: los pilotos GovTech suelen llevarse a cabo a través de contratos menores. El objetivo es introducir una cultura de “prueba” y “aprendizaje” antes de lanzar oportunidades de contratación de mayor envergadura, para de este modo, sacar a la luz lecciones claves para futuras acciones orientadas a favorecer la innovación. Aquí, la meta es “lograr que algo pase”, sin poner tanto el foco en la escalabilidad.
Proyectos destacados
Uno de los pioneros en el país es el Govtechlab Madrid (el primer laboratorio GovTech de Iberoamérica), una iniciativa de la Comunidad de Madrid puesta en marcha en 2020 y que finalizó en 2024 (con un paréntesis en 2023). Este programa colaboró con 48 ayuntamientos y desarrolló 18 pilotos govtech. El siguiente es GovTech Lab Bizkaia, un programa de la Diputación Foral de Bizkaia de tres años de duración, orientado a resolver 15 retos de la institución mediante soluciones de empresas de nicho tecnológico. De forma similar, el programa BIND GovTech 4.0 del Gobierno del País Vasco incorporó una línea GovTech en 2023, trabajando con 9 empresas públicas (como EJIE, SPRI, etc.) y planteando 9 retos de innovación, uno para cada de ellas.
Estos programas demuestran cómo las diferentes regiones de España empezaron a explorar el govtech a través de laboratorios para sentar las bases y demostrar que las startups pueden aportar valor público, allanando el camino para una mayor aceptación del govtech y generar aprendizajes antes de su escalabilidad.
Fase 2: proyectos de innovación abierta estratégicos
Durante 2024 y 2025, los proyectos govtech empezaron a tomar una forma más estratégica. Los laboratorios se transformaron en “Hubs” [4], como espacios dónde integrar de forma coherente la innovación de las startups, marcando así una transición de la exploración a la ejecución estratégica. El objetivo específico de los proyectos de esta fase es generar dentro de los procesos institucionales un flujo de identificación de oportunidades de innovación y de soluciones impulsadas por startups, y en paralelo, promover el uso de nuevas prácticas de contratación y fomentar la colaboración entre “grandes y pequeñas” dentro del ecosistema. Estos hubs se utilizan principalmente para identificar casos de uso de tecnologías innovadoras y para desarrollar precedentes en el uso de nuevas figuras contractuales que permitan abrir la competencia en grandes licitaciones a startups y scaleups.
Principales características de la Fase 2
- Alineación estratégica de los proyectos con las agendas tecnológicas institucionales, impulsando en ocasiones el desarrollo de casos de uso en tecnologías emergentes como la inteligencia artificial o los gemelos digitales.
- Adopción de metodologías de contratación más sofisticadas, como la apertura de oportunidades de escalado directo para startups a través de los Concursos de Proyectos (Directiva 2014/24/UE sobre contratación pública). Tras un Concurso de Proyectos, se puede activar un procedimiento negociado (artículo 32.4), lo que permite a las startups acceder a contratos de mayor envergadura.
- Impulso a la colaboración entre grandes empresas y startups a través de los hubs, centrando los esfuerzos en integrar la propuesta de valor de pequeños proveedores especializados en la cadena de suministro de los operadores tradicionales.
Proyectos destacados
Se comenzaron a aprovechar los marcos de contratación europeos (Directiva 2014/24/UE), utilizando, por ejemplo, el Concurso de Proyectos para probar soluciones innovadoras. Esto permite que en el contexto de los retos govtech se puedan adjudicar contratos de manera directa, garantizando que los pilotos exitosos no se queden estancados posteriormente. Hay dos ejemplos. Por un lado, la convocatoria GovTech del Ayuntamiento de Valencia a finales de 2024 ofrecía que la solución ganadora obtendría un contrato de 50.000 euros para implementar su propuesta, en lugar de limitarse a otorgar un premio. Por otro lado y a mayor escala, el Gobierno de Navarra puso en marcha a principios de 2025 el proyecto “TwIN”, un innovador proyecto de innovación abierta govtech centrado en identificar soluciones de inteligencia artificial y gemelos digitales para reforzar la toma de decisiones y la agilidad operativa en la Administración pública. Ocho retos han sido definidos: cuatro a cargo del Ayuntamiento de Pamplona y otros cuatro junto a actores del ecosistema. Las soluciones se seleccionarán mediante un Concursos de Proyectos e Ideas, con un presupuesto de 480.000 €, repartido en ocho premios de 60.000 € cada uno para desarrollar pilotos.
Fase 3: la integración del govtech en los sistemas de innovación
En 2025, las prácticas govtech empiezan a estar cada vez más integradas en las estrategias de innovación de algunas instituciones, evolucionando de iniciativas aisladas a procesos sistemáticos y continuos. La metodología govtech se incorpora dentro de las unidades de innovación de las administraciones públicas, formando parte de un sistema de innovación a modo funnel, centrado en:
- La identificación constante de retos, que posteriormente se canalizan hacia distintos actores según su naturaleza (grandes empresas, startups, equipos técnicos internos).
- La implementación de una “ruta govtech” para la resolución de parte de esos retos, como pieza integrada en el sistema de innovación de la institución.
- Un papel clave de las administraciones públicas a la hora de incentivar la colaboración entre grandes empresas y startups a través del diseño de licitaciones.
- El uso de prácticas de contratación pública que permitan la participación de startups en oportunidades de mayor envergadura, como los Concursos de Proyectos.
Por ende, el GovTech funciona ahora como un mecanismo estructurado hacia el cual se canalizan ciertos retos. Esta evolución muestra cómo se han dejado de promover proyectos piloto periféricos para convertir el govtech en un componente integrado en la gestión de la innovación institucional.
Principales características de la Fase 3
- Integración total del govtech dentro de las unidades de innovación de las instituciones, que funcionan como catalizadores de la innovación.
- Identificación y pilotaje continuo de soluciones de startups, manteniendo relaciones proactivas con el ecosistema innovador.
- Rutas claramente establecidas para canalizar los casos de uso a startups, grandes proveedores o desarrollo interno.
- Fomento e incentivo activo a las alianzas entre grandes empresas, proveedores tradicionales y startups, garantizando que las innovaciones de las startups que han sido probadas y validadas lleguen a tener aplicaciones a mayor escala dentro de las instituciones.
- Desarrollo y uso sistemático de marcos contractuales innovadores que permitan una contratación ágil y el escalado de startups.
Proyectos destacados
Esta fase queda ejemplificada por el Gobierno de Cataluña - CTTI, donde el govtech ya forma parte de la operativa habitual de la Administración. En 2025, se lanzarán 6 pilotos mediante Concursos de Proyectos, con un presupuesto aproximado de 600.000 €. Un rasgo característico de la Fase 3 es la consolidación de la colaboración entre startups y grandes proveedores tradicionales dentro de contratos públicos. Este modelo mixto permite que las innovaciones de pequeñas empresas govtech sean integradas en sistemas de mayor envergadura o puedan escalar a distintos departamentos con el apoyo de grandes integradores.
Conclusiones
La evolución del ecosistema govtech en España refleja tendencias que también se observan a gran escala en Europa. A nivel estratégico, existe un consenso creciente sobre el papel fundamental de la modernización tecnológica del sector público como motor de competitividad. El Informe Draghi (2024) sobre la competitividad de la UE subraya explícitamente la necesidad de incrementar la inversión en innovación tecnológica para cerrar la “brecha de innovación” que separa a Europa de otras regiones del mundo.
En este contexto, los proyectos govtech desempeñan un papel clave al mejorar la productividad y la calidad de los servicios públicos en España, un componente esencial —aunque a menudo subestimado— de la competitividad económica. Al abrir el mercado público a startups y nuevos proveedores, el govtech permite aprovechar el vasto talento tecnológico europeo para el bien común, en línea con la prioridad que señala Draghi: impulsar la inversión tecnológica como palanca de crecimiento sostenible.
Además, la evolución del ecosistema govtech en España muestra cómo la innovación abierta en el sector público está dejando atrás la etapa de pilotos experimentales para consolidarse en proyectos de transformación digital estructurados, integrados en estrategias más amplias. Así lo anticipa el Informe GovTech 2024 de la OCDE. Este cambio se refleja en las fases 2.0 y 3.0 del govtech en España, donde las iniciativas han superado el enfoque exploratorio para formar parte de marcos de contratación pública y hojas de ruta tecnológicas con visión de largo plazo.
Asimismo, el uso creciente de concursos de proyectos y el impulso a la colaboración entre grandes empresas y startups responde directamente a las recomendaciones de la OCDE: fomentar la innovación digital mediante entornos regulatorios estructurados y una cooperación efectiva con el sector privado. Todo ello demuestra que el govtech no solo incrementa la eficiencia del sector público, sino que también promueve activamente la participación de nuevos actores en el mercado, inyectando innovación en la prestación de servicios públicos.
En definitiva, la evolución del govtech en España entre 2020 y 2025 ilustra el paso de iniciativas puntuales y dispersas hacia un enfoque estructurado y basado en ecosistemas colaborativos. Lo que comenzó como pequeños laboratorios de innovación ha dado lugar a un modelo más maduro, donde startups, pymes y administraciones públicas colaboran regularmente a través de retos y procesos contractuales adaptados a la innovación. Este nuevo enfoque no solo permite ofrecer mejores servicios digitales a la ciudadanía, sino que también refuerza la capacidad de respuesta competitiva de España —y de Europa— ante desafíos emergentes.
Tal como destacan los informes de la OCDE y Draghi, integrar el govtech en el sistema público es clave para que la Administración avance al ritmo del cambio tecnológico, ganando agilidad, eficiencia y preparación para el futuro digital. El caso español constituye así una hoja de ruta inspiradora para otros países que buscan aprovechar la innovación como palanca de transformación y competitividad del sector público.
Este artículo se publicó originalmente como artículo de opinión en Public Sector Tech Watch. Lea el artículo original aquí.
Notas y referencias
[1] Para profundizar en el tema de govtech, visite la Colección GovTech Connect: https://interoperable-europe.ec.europa.eu/collection/govtechconnect
[2] Área de trabajo controlada y facilitada, con un tiempo de ejecución y recursos asignados.
[3] Equipos divididos en partes, secciones o grupos más pequeños, con tendencia al aislamiento.
[4] Centro de actividad de un ecosistema, con la participación de una amplia gama de partes interesadas.